InicioQué es la Divina MisericordiaSanta Faustina: Cómo prepararse para morir

Santa Faustina: Cómo prepararse para morir

Fecha:

Para quien vive en Cristo, la muerte es el paso de la peregrinación terrena
a la patria del Cielo, donde el Padre acoge a todos sus hijos.

1343- Tercer día. Durante la meditación sobre la muerte me he preparado como para la muerte real; hice el examen de conciencia y examiné minuciosamente todas mis acciones de cara a la muerte, y por mérito de la gracia mis actos llevaban en sí el sello del fin último, lo cual ha llenado mi corazón de gran agradecimiento a Dios y he decidido servir en el futuro a mi Dios con más fidelidad. Lo primero, hacer morir completamente al hombre viejo y empezar una vida nueva. Por la mañana me he preparado para recibir la Santa Comunión como si fuera la última de mi vida y después de la Santa Comunión me he imaginado la muerte real y he rezado oraciones por los agonizantes y luego el De Profundis por mi alma, y mi cuerpo ha sido puesto en el sepulcro y dije a mi alma: Mira, lo que es de tu cuerpo, un montón de barro y una gran cantidad de gusanos. He aquí tu herencia.

1344- Oh Dios misericordioso que todavía me permites vivir, dame fuerza para que pueda vivir una vida nueva, la vida del espíritu sobre la cual la muerte no tiene poder. Y mi corazón se ha renovado y he iniciado una vida nueva ya aquí en la tierra, la vida del amor de Dios. Sin embargo, no olvido que soy la debilidad en persona, pero no dudo ni por un momento en la ayuda de tu gracia, oh Dios.

201- Deseo esconderme de manera que ninguna criatura conozca mi corazón. Oh Jesús, solo Tú conoces mi corazón y lo posees totalmente. Nadie conoce nuestro secreto; con una mirada nos entendemos mutuamente. Desde el momento en que nos hemos conocido, soy feliz. Tu grandeza me llena plenamente. Oh Jesús, cuando estoy en el último lugar y el más bajo de las postulantes, incluso las más jóvenes, entonces me siento en el lugar apropiado para mí. No sabía que en aquellos rinconcitos oscuros el Señor había colocado tanta felicidad. Ahora entiendo que incluso en la cárcel, de un corazón puro puede prorrumpir una abundancia de amor por Ti, Señor. Las cosas exteriores no tienen importancia para un amor puro, él penetra todo. Ni las puertas de una cárcel, ni las puertas del cielo presentan alguna fuerza para él. El llega a Dios mismo y nada es capaz de apagarlo. Para él no existen barreras, es libre como un rey y tiene la entrada libre en todas partes. La muerte misma tiene que bajar la cabeza frente a él

Habla al Mundo es un servicio de difusión de la Divina Misericordia que brinda espiritualidad, formación y capacita Apóstoles de la Divina Misericordia.

Para ser parte de esta obra evangelizadora, podés sumarte a nuestros grupos de WhatsApp/Telegram: www.linktr.ee/hablaalmundo

Jesús, en Vos confío

También puede interesarte

«Faustina: No hay humildad sin humillación»

La humildad llena tanto de gozo el corazón que...

Santa Faustina: «La Hora de la Misericordia»

“Jesús, con un grito, exclamó: ‘Padre, en tus manos...

Santa Faustina: «Fuente de todas las gracias»

La Pasión de Cristo es el mayor testimonio de...

Un «baño de fe». Testimonio de la peregrinación a Cracovia

El diácono Juan Carlos Guardia, desde Bolivia, nos comparte...

Santa Faustina: «Nuestro Redentor»

La infinita bondad de Dios en la redención del...

La fiesta de la Divina Misericordia: 2º Domingo de Pascua

“Deseo que haya una Fiesta de la  Misericordia. Quiero...
Abrir chat
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?
Salir de la versión móvil