Evangelio
Vino la palabra de Dios a Juan, hijo de Zacarías, en el desierto. Y él fue por toda la región contigua al Jordán, predicando el bautismo del arrepentimiento para perdón de pecados. La gente le preguntaba: “¿Qué debemos hacer entonces?” El les respondía: “El que tenga dos túnicas, dé una al que no tiene; y el que tenga qué comer, haga otro tanto”.
Algunos publicanos vinieron también a hacerse bautizar y le preguntaron: “Maestro, ¿qué debemos hacer?” El les respondió: “No exijan más de lo estipulado”.
A su vez, unos soldados le preguntaron: “Y nosotros, ¿qué debemos hacer?” Juan les respondió: “No extorsionen a nadie, no hagan falsas denuncias y conténtense con su sueldo”.
Como el pueblo estaba a la expectativa y todos se preguntaban si Juan no sería el Mesías, él tomó la palabra y les dijo: “Yo los bautizo con agua, pero viene uno que es más poderoso que yo, y yo ni siquiera soy digno de desatar la correa de sus sandalias; El los bautizará en el Espíritu Santo y en el fuego. Tiene en su mano la horquilla para limpiar su era y recoger el trigo en su granero. Pero consumirá la paja en el fuego inextinguible”. Y por medio de muchas otras exhortaciones, anunciaba al pueblo la Buena Noticia.
San Lucas 3, 2b-3.10-18
Video con reflexión del evangelio Pbro. Germán Saksonoff co.
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Reflexión del evangelioPbro. lic. Mauro Carlorosi, co.
Aquellos soldados que preguntan a Juan qué deben hacer, buscan paz en la conciencia. Saben que deben agradar a Dios y algo deben cambiar, pues sus obras los delataban. La luz de la verdad que traía Juan ponía en evidencia la sombra de sus extorsiones, sus falsos testimonios para obtener dinero y poder, etc. Juan los encamina a ellos y a nosotros a buscar realmente a Dios con buenas obras y la paz de la conciencia.
Propósito del día
No despreciaré a nadie. Hablaré, ayudaré a todos,
especialmente a los que me caen mal.
Santos del día: beato Carlos Steeb
De una distinguida familia luterana alemana, nació en Tubinga en 1773. Tras convertirse al catolicismo fue consagrado sacerdote por el obispo de Verona. Fundó el Instituto de las Hermanas de la Misericordia en apoyo de los afligidos, los necesitados y los enfermos, donde murió en 1856.
Liturgia del día
3er Domingo de Adviento. Morado o Rosado.
Tercera semana para el Salterio.
Reflexión para las tres de la tarde
Jesús clama en el huerto: “Padre mío, si es posible, que pase de mí este cáliz, pero que se haga tu voluntad”. Con estas palabras mostraba Jesús la magnitud de las penas que sufría, pero que, sin embargo, abrazaba por nuestro amor.
Preparémonos para su Venida
De una homilía del papa Benedicto XVI
“Dios se inclina. Esta es una palabra profética. En la noche de Belén, esta palabra ha adquirido un sentido completamente nuevo. El inclinarse de Dios ha asumido un realismo inaudito y antes inimaginable.
El se inclina: viene abajo, precisamente El, como un niño, incluso hasta la miseria del establo, símbolo de toda necesidad y estado de abandono de los hombres. Dios baja realmente”.
Habla al Mundo es un servicio de difusión de la Divina Misericordia que brinda espiritualidad, formación y capacita Apóstoles de la Divina Misericordia.
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Jesús, en Vos confío
