Evangelio
Jesús subió a la barca, atravesó el lago y regresó a su ciudad. Entonces le presentaron a un paralítico tendido en una camilla. Al ver la fe de esos hombres, Jesús dijo al paralítico: “Ten confianza, hijo, tus pecados te son perdonados”. Algunos escribas pensaron: “Este hombre blasfema”. Jesús, leyendo sus pensamientos, les dijo: “¿Por qué piensan mal? ¿Qué es más fácil decir: ‘Tus pecados te son perdonados’, o ‘Levántate y camina’? Para que ustedes sepan que el Hijo del hombre tiene sobre la tierra el poder de perdonar los pecados -dijo al paralítico- levántate, toma tu camilla y vete a tu casa”.
El se levantó y se fue a su casa.
Al ver esto, la multitud quedó atemorizada y glorificaba a Dios por haber dado semejante poder a los hombres.
San Mateo 9, 1-8
Video con reflexión del evangelio p. Germán Saksonoff co.
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Reflexión del evangelio Pbro. lic. Mauro Carlorosi, co.
Si, Dios ha dado semejante poder a los hombres, cuando da a los sacerdotes el “poder” celestial de perdonar los pecados. Sí, algo que sólo Dios puede hacer, ha sido delegado en un sacerdote también débil que debe confesarse con frecuencia.
En cada confesionario, en cada Confesión, se renueva un milagro más grande que el de la creación.
Propósito del día
Tendré algún detalle de amor con alguna persona que comparto el
día (padres, hijos, nietos, hermanos, compañero de trabajo, etc.).
Santos del día: santa Isabel de Portugal
Nació en 1271 en Aragón y se casó con el rey Denís de Portugal, quien era violento, infiel y de vida escandalosa. Tuvo dos hijos, y al quedar viuda se recluyó por tres meses en un monasterio. Santificó su viudez en la Orden Tercera de San Francisco. Murió en 1336.
NR: Diariamente leía la Biblia, iba a Misa, dirigía las labores del personal, cosía prendas para los pobres, y visitaba a enfermos y ancianos.
Liturgia del día
Feria. Verde/ Santa Isabel de Portugal. Blanco. Memoria
libre / Lecturas: Amós 7, 10-17/ Sal 18, 8-11
Reflexión para las tres de la tarde
Quitaron las vestiduras a Jesús torpemente, pero sin romper su túnica porque tenían pensado sortearla. Nuestro Señor quedó completamente desnudo a la vista de todos y la muchedumbre se burlaba de su purísimo Cuerpo.
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Jesús, en Vos confío
