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Una buena convivencia de HERMANOS

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Hermanos y rivales: la negociación entre hermanos es una habilidad importante para la vida.

La rivalidad entre hermanos es algo común en la convivencia que sucede en la mayoría de las familias. La frase “hoy me toca a mí” puede generar disputas y tensiones si no se maneja adecuadamente. Sin embargo, aprender a negociar con los hermanos de una forma justa y trabajar emocionalmente para llegar a acuerdos puede ser una herramienta valiosa para crear los cimientos de unas relaciones saludables y respetuosas tanto dentro como fuera del ámbito familiar.

Si no quieres pelearte continuamente con tus hermanos por el asiento en el auto, por darle a mamá o a papá un beso primero o por elegir lo que vas a cenar esta noche, aquí encontrarás algunas estrategias para negociar con tus hermanos cuando se trata de establecer turnos.

Ideas para negociar con tus hermanos y no pelear

“Hoy me toca a mí” puede ser un tema sensible, pero con un poco de negociación amigable, puedes mantener la paz en casa y evitar las constantes peleas entre hermanos.

Establecer comunicación abierta

Para que cualquier negociación tenga éxito, debe estar basada en una comunicación abierta y honesta. Anima a tus hermanos a expresar sus necesidades y deseos, y asegúrate de hacer lo mismo. Escuchar con atención y empatía es fundamental para comprender las perspectivas de todos.

Establecer reglas claras

Antes de entrar en una negociación, es útil establecer reglas claras y acuerdos básicos. Por ejemplo:

-Puedes acordar que los turnos se rotarán semanalmente o mensualmente, o que se establecerá un cronograma para ciertas responsabilidades.

Compromiso y Flexibilidad

La negociación implica compromiso. En lugar de aferrarte rígidamente a tus propias necesidades y deseos, sé flexible y considera las soluciones que funcionen para todos. A veces, puede ser necesario hacer concesiones para llegar a un acuerdo.

Enfocarse en soluciones, no en culpas

En lugar de señalar con el dedo o culpar a alguien por un conflicto, céntrate en encontrar soluciones. Pregúntate a ti mismo y a tus hermanos: “¿Cómo podemos resolver esto juntos de manera equitativa?”

Compromiso ganar-ganar

Busca soluciones que beneficien a todos. Un enfoque de “ganar-ganar” significa que todos los involucrados sienten que han obtenido algo positivo de la negociación. Esto fomenta un sentido de equidad y cooperación en lugar de competencia.

Negociaciones justas

Asegúrate de que las negociaciones sean justas y estén equilibradas. Si un hermano siente que está siendo explotado o tratado injustamente, la cooperación se romperá. Asegúrate de que todos tengan una oportunidad igual de participar y de disfrutar de los beneficios

Comprensión de las diferencias

Reconoce que cada hermano es único y puede tener diferentes necesidades y deseos. Trata de entender las perspectivas de los demás y muestra respeto por sus diferencias.

Resolución de conflictos

Es normal que surjan conflictos a pesar de las mejores intenciones. Cuando esto ocurra, recuerda los acuerdos previos y utiliza técnicas de resolución de conflictos, como hablar con calma y buscar soluciones juntos.

Modelo de comportamiento

Los hermanos mayores pueden desempeñar un papel importante como modelos de comportamiento. Si estableces un ejemplo positivo al negociar y resolver conflictos, es más probable que tus hermanos menores sigan tu liderazgo.

Aprender de las experiencias

Cada negociación y conflicto es una oportunidad de aprendizaje. Reflexiona sobre lo que funcionó y lo que no lo hizo, y utiliza esas lecciones para futuras negociaciones.

En última instancia, la negociación entre hermanos se trata de encontrar un equilibrio entre las necesidades y deseos individuales y el bienestar del grupo familiar en su conjunto. Cuando se maneja con empatía, respeto y un espíritu de cooperación, puede ayudar a fortalecer los lazos familiares y promover relaciones saludables que perduren toda la vida. Además, la negociación entre hermanos es una habilidad importante para la vida. Al enseñarles a tus hijos a negociar de manera justa y respetuosa, les estás proporcionando una herramienta valiosa que los ayudará en el futuro y, al mismo tiempo, estás fortaleciendo los lazos familiares. ¡Mantén la calma y sigue adelante!

(Marisol Nuevo Espín/ Adaptación)

 

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