Los ángeles y la adoración
Dios creó a todos los ángeles desde el principio. Y Él da un ángel de la guarda a cada persona.
Cada niño, mientras está adorando a Jesús en la hora santa, tiene a su propio ángel de la guarda adorando profundamente a Dios junto a él. Al enseñarle a los niños a acostumbrarse a orar junto a su ángel de la guarda y a invocarlo diariamente, los ayudará a crear con él una amistad que durará hasta la eternidad.
Sugerencias para padres y catequistas
1. Asista con asiduidad y en familia a la Misa dominical. Dediquen tiempo a la oración antes o después de la Misa.
2. Adoren el Cuerpo y la Sangre de Cristo elevado durante la Misa, rezando en silencio la frase: “Señor mío, Dios mío”.
3. Participen cuando les sea posible en la adoración del Santísimo Sacramento.
4. Hagan con reverencia una genuflexión ante el Santísimo Sacramento.
5. Visiten al Santísimo Sacramento, tanto individualmente como en familia.
6. Estudien en familia con asiduidad la Sagrada Escritura y lleven a cabo catequesis familiar sobre la Eucaristía.
7. Lean las vidas de santos eucarísticos, como Santa Catalina Drexel o San Juan Neumann.
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Jesús, en Vos confío