Evangelio
Jesús entró en el Templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo, para decirle: “¿Con qué autoridad haces estas cosas? ¿Y quién te ha dado esa autoridad?” Jesús les respondió: “Yo también quiero hacerles una sola pregunta. Si me responden, les diré con qué autoridad hago estas cosas. ¿De dónde venía el bautismo de Juan? ¿Del Cielo o de los hombres?” Ellos se hacían este razonamiento: “Si respondemos: ‘Del Cielo’, El nos dirá: ‘Entonces, ¿por qué no creyeron en él?’ Y si decimos: ‘De los hombres’, debemos temer a la multitud, porque todos consideran a Juan un profeta”. Por eso respondieron a Jesús: “No sabemos”. El, por su parte, les respondió: “Entonces Yo tampoco les diré con qué autoridad hago esto”. San Mateo 21, 23-27
Ver video con reflexion del Evangelio Pbro. Germán Saksonoff co.
Reflexión del evangelio Pbro. lic. Mauro Carlorosi, co.
¿Quién te ha dado esa autoridad?
Le preguntan los judíos. Era la pregunta clave. Sin autoridad para decir algo, ese algo carecía de verdad y no podía obedecerse. La autoridad deJesús viene de su propia divinidad y esa es la autoridad que dejó en la Iglesia Católica por el Orden Sagrado.
Cuántos hoy hablan de Dios y se dan autoridad a sí mismos sin tenerla ante Dios. Inventan o utilizan las verdades del Evangelio para provecho propio y utilizan a la gente llevándolas
a la mentira de que no hay una verdadera autoridad.
Popósito del día
Renunciar a un gusto (comida, comodidad) y ofrecerlo por alguien enfermo.
Santos del día: Santa María Crucificada de Rosa
Italiana nacida en 1803. Al quedar huérfana de madre, ingresó en el colegio de las Monjas
de la Visitación. Impresionada ante el sufrimiento y la muerte, se entregó a Cristo, y nació
su vocación a la caridad hospitalaria. Fundó el instituto Siervas de la Caridad. Murió en 1855.
Liturgia del día
Feria. Morado. Lecturas: Núm 24, 2-7.17a / S.R. 24, 4-5a.6-7bc.8-9
Reflexión para las tres de la tarde
Al ser entregado el Salvador por Pilato a los verdugos, se lo llevaron y le mandaron que se desnudase. Y Jesús, como un cordero manso, se desnudó y se dispuso a padecer el tormento de la flagelación sin resistencia alguna.
Ya viene el Señor. Himno de Adviento
Virgen del Adviento, esperanza nuestra, de Jesús la aurora, del Cielo la puerta. Madre de los hombres, de la mar estrella, llévanos a Cristo, danos sus promesas. Eres, Virgen Madre,
la de gracia llena, del Señor la esclava, del mundo la Reina. Alza nuestros ojos hacia tu belleza, guía nuestros pasos a la Vida Eterna.
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