Evangelio
Jesús dijo a sus discípulos: “Tengan cuidado de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos: de lo contrario, no recibirán ninguna recompensa del Padre que está en el Cielo. Por lo tanto, cuando des limosna, no lo vayas pregonando delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser honrados por los hombres. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa. Cuando tú des limosna, que tu mano izquierda ignore lo que hace la derecha, para que tu limosna quede en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
Cuando ustedes oren, no hagan como los hipócritas: a ellos les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa. Tú, en cambio, cuando ores, retírate a tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
Cuando ustedes ayunen, no pongan cara triste, como hacen los hipócritas, que desfiguran su rostro para que se note que ayunan. Les aseguro que, con eso, ya han recibido su recompensa.
Tú, en cambio, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lava tu rostro, para que tu ayuno no sea conocido por los hombres, sino por tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará”.
San Mateo 6, 1-6.16-18
Video con reflexión del evangelio Pbro. Germán Saksonoff co.
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Reflexión del evangelioPbro. lic. Mauro Carlorosi, co.
Comienza la Cuaresma, se nos marca la frente con ceniza. Ceniza que viene de un fuego que arde e ilumina y con su ceniza nos dice que estamos para arder de amor, no para vivir en el barro de los cerdos. Ayuno, oración y limosna es lo que eleva al cristiano de pagano, al hombre del animal, al sabio del ignorante, al hijo de Dios del hijo de este mundo. Cuaresma sea tu despertar y volver a Dios, porque de polvo eres y al polvo volverás.
Propósito del día
Procuraré participar de la Santa Misa de hoy. Si no puedo, ofreceré el ayuno de hoy por la Iglesia y su fidelidad a Cristo.
Santos del día: Miércoles de Ceniza
Hoy comienza la Cuaresma: 40 días dedicados a la oración, la penitencia y los actos de caridad y misericordia, como preparación para celebrar la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo. Hoy se realiza el rito de la imposición de la ceniza en la cabeza de los fieles. En la liturgia se adopta el color morado, símbolo de la austeridad cuaresmal. Es un tiempo de gracias especiales para la propia conversión.
Liturgia del día
Miércoles de Ceniza. Morado.
Día de ayuno y abstinencia.
Reflexión para las tres de la tarde
Cuando Jesús instituyó el Santísimo Sacramento y lo dio a sus discípulos, llegó Judas a recibirlo en estado de pecado mortal, y habiendo comulgado el demonio se apodero de él y Jesús sintió como una estaca en su Corazón.
Conversión del corazón
Significado de la imposición de las cenizas
La liturgia del Miércoles de Ceniza señala la dimensión fundamental de Cuaresma como la conversión del corazón a Dios. Ese es el mensaje que evoca la tradición del rito de las cenizas… Es un rito con doble significado: el primero tiene que ver con el cambio interior, la conversión y la penitencia, mientras que el segundo evoca la precariedad de la condición humana, como se comprende fácilmente a partir de las dos fórmulas alternativas que acompañan el gesto de colocar las cenizas:
“Convertíos y creed en el Evangelio”, “Acuérdate de que eres polvo y al polvo volverás”.
“Con la imposición de la ceniza renovamos nuestro compromiso de seguir a Jesús, de dejarnos transformar por su misterio pascual, para vencer el mal y hacer el bien, para hacer que muera nuestro ‘hombre viejo’ vinculado al pecado y hacer que nazca el ‘hombre nuevo’ transformado por la gracia de Dios”
(Benedicto XVI)
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Jesús, en Vos confío
